Pasó la Navidad ¿Toca hacer dieta?

Pasó la Navidad ¿Toca hacer dieta?

Han acabado las Navidades, y como hay mensajes virales para todo, pues ahora uno de los que más circula es: ¡¡Los Juegos del Hambre han comenzado¡¡, relacionando la película taquillera con la necesidad de hacer dieta tras un periodo en el que nos hemos permitido no preocuparnos por lo que comíamos.
Ni que decir tiene, que este planteamiento de todo o nada, lo trasladamos a demasiadas cosas en nuestras vidas con sus respectivas consecuencias. En el caso de la alimentación es claro que hay momentos en los que por circunstancias culturales y sociales se tiende a comer más allá de lo que sería una dieta equilibrada y tener la flexibilidad de permitírnoslo nos permite, a su vez, estar integrados en dichos actos sociales. No obstante, vivir esto como la oportunidad para desmadrarnos porque tenemos dicha licencia social y por que el mercado nos impulsa a ello, es un error tan grande, como que sea cual sea el exceso que hayamos hecho, tratemos de compensarlo con una dieta y mucho más si esta es estricta. Solo estamos enseñando a nuestro organismo a que cuando proveemos a nuestro cuerpo de nutrientes se quede con todos ellos ya que a posteriori vendrá una época de restricción, lo que significa que cada vez me cuesta menos ganar peso y más perderlo, y que tendemos hacer cada vez en mayor medida efecto péndulo, perdiendo kilos para después recuperarlos en mayor medida.
En definitiva, el cuerpo tiene un sistema hemostático mucho más complejo de lo que pensamos y no se trata de meter y sacar obteniendo un resultado exacto e inmediato y sobre todo duradero.
Cómo siempre digo, si existiera una dieta efectiva verdaderamente solo existiría esa y no todas las que hay y queda por inventar (los intereses económicos detrás de ello son muy sustanciosos).
No se recupera el sueño de varias noches sin dormir durmiendo muchas horas seguidas, de la misma manera que no estabilizo mi peso dejando de comer un tiempo seguido, ¿qué así puedo bajar de peso a corto plazo? es muy posible, pero ¿qué así conseguiré estabilizar mi peso, mi salud y mi estima?: NO, en absoluto.
 
Tengamos criterio para entender que lo importante es trabajar en los hábitos (para que estos sean moderados en todos los sentidos), y que eso es un trabajo largo y costoso por el que muchas veces no podemos o queremos permitírnoslo hacer en nuestras vidas, vale¡¡ fenomenal¡¡ pero no lo intentemos arreglar con campañas de hambre¡¡¡
 
Y para compensar todo esto yo os propongo la dieta del encabezamiento de este post, que no tiene nada que ver, pero que si la ponéis en práctica, seguro que vuestro cuerpo y mente os lo agradecerá¡¡¡

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies